No sé cómo empezar la entrada de hoy, aún sigo consternada. Y es que ayer terminé de ver la serie producida por HBO llamada "Girls". Sí, sé que el título genera prejuicios y que lo que se espera es que sea un refrito de "Sexo en Nueva York" y "Gossip girl", pero no ha sido así. Creo que la definiría como una patada en el útero de realidad, pero una patada necesaria.
La autora
La serie está protagonizada, dirigida y escrita por
Lena Dunham, que por aquel entonces era una jovenzuela de veintitantos años. La primera mujer en producir una serie para una cadena privada de tal magnitud como HBO. Pero antes de eso, ya había rodado alguna película independiente como
Tiny Furniture (2010), que estoy deseando ver. Además, publicó un libro llamado
No soy ese tipo de chica, el cual me arrepiento profundamente de habérselo regalado a unas hermanas muy majas que venían el curso pasado a clases de inglés conmigo. Y normalmente, no me suele pasar eso. De los libros que he donado, solo me he vuelto a comprar
Cien años de soledad por presión social, pero no debo de ser lo suficientemente culta ni intelectual para que me guste. Volviendo a Dunham, creo que es de esas personas que amas o odias. Yo la amo porque no tiene miedo en alzar la voz y denunciar las injusticias.
Millenials
La serie se centra en las vidas de cuatro jóvenes (Hannah, Marnie, Jessa y Soshanna) que están en esa etapa de la vida en la que no se es ni una chica ni una mujer. Excepto Soshanna, todas han terminado la carrera hace un par de años y se mudan a vivir a Nueva York, esa ciudad que tenemos idealizada, la ciudad de las oportunidades. Pero se dan de bruces con la realidad: a pesar de estar ser la generación mejor preparada académicamente, labrarse un futuro profesional no es fácil. Esta generación de la que hablo son los "millenials" (a la que yo misma pertenezco).
Es difícil establecer un límite, pero más o menos seríamos los nacidos entre 1981 y 2000. Esa generación que vive a caballo entre dos mundos, entre uno que muere y otro que no acaba de nacer. Somos los últimos en haber hecho muchas cosas y los primeros en hacer otras muchas. Somos la primera generación que ha crecido con la tecnología, que ha vivido los inicios de Internet y las nuevas formas de comunicación. Pero también hemos conocido ese mundo que estamos dejando atrás: esa época en la no existían los móviles, de máquinas de escribir y de cintas en VHS. Hemos tenido la vida mucho más fácil que nuestros padres, se nos considera caprichosos, mimados y narcisistas, pero lo cierto es que en cuanto a crecer laboralmente, lo tenemos muy difícil. Si nuestros padres aspiraban a un trabajo que les diera para vivir, nosotros aspiramos al trabajo de nuestros sueños. Y de eso va Girls, de esa generación perdida, sobre cómo afrontar los fracasos y de esperar ese futuro ansiado que nunca llega.
¿Lena Dunham es la voz de nuestra generación?
La serie comienza con una escena en la que vemos a la protagonista, Hannah, cenando con sus padres. Estos le comunican que van a cerrarle el grifo y que a partir de ahora va a tener que mantenerse sola. Hannah sueña con ser escritora, sabe que tiene potencial y talento pero necesita depender económicamente de sus padres para explotar su creatividad. En una serie normal, lo que esperaríamos es que la protagonista agarrara el toro por los cuernos, afrontara la situación y demostrara a todo el mundo que puede sobrevivir sola. En cambio, Hannah lloriquea como la niña caprichosa que es, incluso llega a decirle a sus padres la suerte que tienen porque no es ninguna drogadicta. Al día siguiente, Hannah se presenta en la habitación de sus padres (curiosamente, después de haber ingerido opio) y les pide una manutención de 1,100 dólares durante dos años para poder terminar su novela (oferta que rechazan). Además de decir algo muy revelador, que "quería ser la voz de su generación". A raíz de ese comentario, se lapidó la serie, llamando a Dunham ególatra y pretenciosa. Y aunque ella misma ha dicho que el personaje de Hannah está inspirado en sus vivencias, tenemos que separar la actriz del personaje.
Las chicas
Hannah, como he dicho, es la protagonista. Se ha graduado en lo que en España sería Filología Inglesa y es becaria (sin cobrar) en una editorial, en la que espera que el libro que está escribiendo sea publicado. Se cree única y especial, y que el mundo gira porque ella respira. Tiene una personalidad narcisista: cree demasiado en sus posibilidades y en su capacidad como escritora. Es muy inconstante, no termina nada de lo que empieza y salta de un trabajo a otro porque no están a su altura. Además, tiene un sentido del humor muy ácido y negro. Recuerdo especialmente una escena en la que hace una entrevista de trabajo y parece congeniar bien con el espectador, yo incluso pensé que se iban a liar. En el último momento hace una broma poco afortunada sobre las violaciones en los campus universitarios y la cara del chico es un poema. ¿Sabéis quién es Sheldon Cooper, no? Todos estamos de acuerdo en que es odioso, pero aún así lo amamos. Algo así sucede con Hannah.
Marnie, en un principio, parece la más centrada del grupo. Tiene "el novio perfecto" y es la única que tiene un trabajo remunerado en una galería de arte. Sin embargo, no parece estar del todo a gusto en esa relación (el chico es un soso) y a raíz de la ruptura con Charlie, su novio, y el ser despedida de su trabajo, cae al vacío. A lo largo de la serie, somos testigos de la dependencia emocional que tiene de los hombres con los que sale. Es el personaje más perdido de la serie, todo lo va mal y no sabe sabe tomar ninguna decisión correcta.
Jessa es difícil de definir. De origen británico, opta por un estilo de vida más alternativo. No terminó la universidad y se dedica a viajar y a vivir la vida sin pensar mucho en el futuro, ni en nada. Toma las decisiones a lo loco (en el último capítulo de la primera temporada se casa con un hombre al que apenas conoce y muy poco después, se psepara). Viene de un hogar desestructurado que ha hecho mella en ella y tiene un serio problema con las drogas.
Soshanna, medio judía y prima de Jessa. Es más joven que las demás y aún está en la universidad. Pese a sus idas y venidas, me parece la más centrada de las cuatro y tiene más claro lo que quiere. Le avergüenza profundamente ser virgen con 21 años, pero pronto eso cambia y tiene su etapa de ir de cama en cama. Cuando se gradúa y ve que que el mundo laboral no es lo que espera, se viene abajo. Aún así, pronto le ofrecen la oportunidad de irse a trabajar a Tokio y ese viaje es muy revelador y se encuentra a sí misma. Aunque al principio de la serie parece tímida y que no se atreve a expresar su opinión en público, con el paso del tiempo empieza a soltar verdades envueltas en dardos envenenados.
La ciudad que nunca duerme
Como telón de fondo tenemos Nueva York, más concretamente el distrito de Brooklyn. Contrasta mucho con la imagen que tenemos de las películas: nos muestra el otro la de la moneda. Las chicas pertenecen a una clase social media-alta y sin embargo, a duras penas llegan a final de mes. Nos muestra una ciudad gris (o sucia), más hipster y económica que Manhattan.
Sexo
El sexo es una parte importante de la serie, aunque no forme parte de la trama. Se representa de un modo muy realista y está muy lejos de las escenas de Hollywood rítmicas, en las que ambos tienen orgasmos a la vez y todo es perfecto. En Girls las escenas sexuales son grotescas, sucias, antieróticas y explícitas. Es decir, muy realistas. Y es que, el sexo sacado de contexto, ¿no es simplemente un asqueroso intercambio de fluidos? El cine y la literatura han "endulcarado" las relaciones sexuales. Hace un tiempo leí un artículo que hablaba del sabor que las vaginas en la literatura saben a fresas, a néctar de azúcar, etc. Y hablemos con propiedad: los coños saben y huelen a coño. El sexo no huele ni sabe a frambuesa, sino a sudor, a semen, a sangre, a látex, etc.
La serie no está rodada en una época en la que el sexo es solo para las chicas malas y cada una de ellas explora y experimenta su sexualidad. A veces con amor y otras sin él. Además, Lena Dunham quiere alzar la voz y denunciar ciertas actitudes machistas de los hombres. A Addam, un novio "rarito" que tuvo Hannah, le gustan las prácticas sexuales un poco bestias y, aunque la protagonista accede, no se la ve realmente cómoda.
Hubo una escena sexual que HBO pensó que era demasiado, en la que Addam eyacula sobre su novia que tuvo tras romper con Hannah. Se estuvo a punto de censurar, pero independientemente de que la escena fuera de mal gusto o no, lo terrible aquí es que ni siquiera queda claro si se trató de una violación. Muchas mujeres son violadas por sus parejas sin saberlo (porque el que alguien sea tu pareja no tiene vía libre sobre ti) y en la serie eso queda ahí, de forma anecdótica.
También me llama la atención la forma en la que se trata el acoso sexual en el trabajo. Sé que quizá penséis que lo hacen de forma frívola, haciendo chanza sobre el tema. El caso es que Hannah logra un trabajo en una editorial y el jefe, un señor de apariencia muy amable, tiene la mano muy larga. Ella se sorprende de cómo actúan sus compañeras, acceden porque de ese modo obtienen privilegios. Y esta chica, con ideas de bombero, le propone follar para así poder publicar su novela. El hombre se ríe en su cara y le dice "que no quiere follar con ella", pero valora su sentido del humor.
Desnudos integrales
Lena Dunham está claro que quiere romper el cánon de belleza actual y quiere dar visibilidad a cuerpos con michelines, bajitos, con celulitis e imperfectos. Es decir, cuerpos reales. Para ello se expone a sí misma en pantalla. La vemos en todo tipo de situaciones desnuda o semidesnuda, lo cual a mucha gente ha incomodado. Y digo yo, ¿si fuera Nathalie Portman incomodaría tanto? Me parece importante señalar una escena en la que un amante de Hannah le señala la gran cantidad de vello púbico que tiene y ella le mete un zasca diciéndole que su función es proteger la vagina.
¿Racismo?
A la serie se la ha acusado de no haber representación racial, teniendo en cuenta que Brooklyn es un lugar muy multicultural. Creo que Dunham no quiere hablar por otras razas. Ella es de raza blanca y tiene una posición social privilegiada. ¿Quién es ella para hablar en nombre de las mujeres negras? ¿No es eso lo que se ha hecho siempre? ¿Hablar por las mujeres y hablar por las personas de otras razas? La autora quiere hacer una crítica de su clase social y habla de los problemas de su clase. Entiendo que hay que dar visibilidad a todo el mundo, pero parece que a la protagonista hay que meterle con calzador una amiga negra y un amigo gay, para que se vea que no es ni racista ni homófoba.
La amistad es para siempre
Seguramente supongáis que en la serie se retrate una amistad invencible, que aunque la vida sea difícil se tienen unas a otras para apoyarse. No creo que en verdad sean tan amigas y a medida que la serie avanza, se ve cómo van cambiando y distanciándose. Y creo que esto se asemeja más a la realidad que la famosa canción de "amigos para siempre". Un día te das cuenta de que ya no tienes absolutamente nada en común con tus amigas, que lo que os unía ya no existe, que ni os veis y la única relación que tenéis son incómodas conversaciones por Whatsapp, si es que te responden. Al final cada uno tiene que seguir su camino y los amigos van y vienen.
A Hannah siempre se la tacha de egoísta y creerse el centro de todo, pero las demás también lo son y solo piensan en sus intereses. No quiero decir que se caiga en el tópico de que "las mujeres somos malas y nos jodemos unas a otras", simplemente que no son tan amigas como pensaban. Vemos cómo que a veces se sigue siendo amigo de alguien por inercia y porque da pereza "mandarse a tomar por culo".
¿La maternidad como símbolo de madurez?
En la sexta y última temporada Hannah se queda embarazada de un rollo de una noche. Lena no está en contra del aborto, está a favor de que la propia mujer decida si quiere ser madre o no. Y el caso es que sí, choca a un personaje como Hannah afrontando la maternidad, en una época de su vida tan inestable a nivel emocional y laboral. No la vemos como madre por cómo ha sido la trayectoria del personaje: es muy inmadura, volátil, poco centrada y muy alocada.
Pero la maternidad no siempre llega cuando toca y algunas veces llega de improviso en el peor momento. Esto hizo que la serie fuera muy criticada porque muchos creyeron que daba a entender que se alcanza la madurez cuando se tiene hijos. Pero no creo que se nos quiera transmitir eso: Hannah está aterrada y alguien importante para ella le dice "vas a ser una mala madre" y en el fondo, el espectador piensa eso. En el último capítulo, la vemos ya con su hijo y su maternidad se aleja mucho de la idea que tenemos de que todo es maravilloso. Se siente frustrada y que su hijo la odia, y no tiene la madurez suficiente para afrontarlo. Su amiga Marnie se muda con ella para ayudarla los primeros meses y parece que recae en ella toda la responsabilidad del bebé.
Me gusta que se dé esta visión porque aunque no soy madre, creo que nos meten la idea en la cabeza de que ser madre es el culmen de la felicidad. Hannah posiblemente ya no sea escritora y ha dejado de lado sus aspiraciones profesionales para centrarse en su hijo. Girls nos muestra que poco importa los sueños de cada uno porque al final, generalmente, la vida te lleva hacia otro lado.
Cuestiones
Si en una reseña de una película me dejo muchas cosas en el tintero, imaginad en una serie de seis temporadas. Creo que es una serie necesaria, que no trata de un grupo de niñas consentidas y mimadas,. También creo que es una serie que reivindica el feminismo y su necesidad, aunque se observen algunos comportamientos machistas de los personajes. Que las personas actúen sin comportamientos machistas es una utopía, lo tenemos tan interiorizado que forma parte de nuestro día a día. Lena Dunham lo muestra y lo señala
Hay un capítulo que es oro puro, que aunque no tengáis intención de ver la serie, lo tendríais que ver. Se trata del tercer capítulo de la sexta temporada llamado "American bitch" (La zorra de América), en el que Hannah es llamada para conversar con un escritor al que ella admiraba acusado de varias agresiones sexuales a universitarias. Ella va con la idea de señalarlo y de dar voz a esas mujeres víctimas de abusos que son silenciadas. Pero el tipo, un seductor nato, la va llevando a su terreno y poco a poco se va relajando. Cuando parece que ya duda de su culpabilidad y empieza a conectar con él, le pone el pene encima.
No creo que sea una serie para todo el mundo. Es políticamente incorrecta y tiene un sentido del humor que no gusta a todo el mundo. No tiene nada que ver a ninguna serie que haya visto, a lo que más me recuerda es al cine independiente. Os animo a verla y que luego me lo dejéis en los comenatarios. ¿Me recomendáis las series que más os hayan impactado? ¿Conocíais a Lena Dunham?
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